sábado, 6 de febrero de 2010

Como Perros

Miro, hacia adelante, no veo nada
busco peldaños, no existe escalera,
no hay piedras en el camino
porque el sendero es inexistente.

¿Cuando no sabemos donde mirar?
¿Hacia donde van nuestras miradas?
¿Cuando no tenemos una meta fijada?
¿Quien determina la línea de salida?

Marcarse objetivos no es un error, sino una forma de vida. Me atrevería a decir que la que conocemos, en la que nos criaron, ya que sin esa motivación no somos capaces de seguir andando. Nacemos fisiológicamente preparados para actuar a cambio de algo, negar es una opción, pero creo que esta vez no me falla mi certeza. Una simple asociación de estímulos, otra de las causas que me siguen explicando nuestra descendencia de los animales.

Salivamos desesperados
si a lo lejos, brilla el oro.
Si el final sigue oscuro,
nos asentamos, adaptamos.

Yo no decidí acomodarme
puesto que sigo avanzando.
Confieso: "no hay día que pase
sin que prosiga temblando".


Refutar a Pavlov es complicado,
pero creo que estoy aprendiendo
a babear al ver mi hueso,
ignoro las campanas...

5 comentarios:

  1. Parece que no soy sólo yo el que pasa las noches de los viernes en el blog

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  2. tienes razon
    la razon de nuestra existencia es perseguir objetivos, aunque sean objetivos banales, como ver cada dia la mañana siguiente
    un saludo

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  3. ¿Que te inspira a soltar estos versos que solo pregonan la verdad cruda que duele a la gente comun y corriente hacerse consciente de ellos?

    Carajo eres buena con la pluma virtual!

    H.

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  4. :) hoy me siento animal, no sé hacer planes

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Gracias por pasarte por el bosque mágico, vuelve cuando quieras ;)