alcohol, drogas, sexo...e incluso rock & roll...
Me confirman cada día que descendemos de los animales, y eso me gusta.
Me gusta porque sienten, porque se atreven
porque no tienen miedos absurdos.
Solo se asustan del verdadero peligro, no de uno fictico que sus mentes son capaces de crear para "protegerlos" del exterior.
Se dan cabezados atroces sin pensar en la sangre que conlleve.
Follan delante de masas sin pudor alguno.
Puden llegar a correr hasta caer fundidos,
o gritar sin tener que verse sometidos a patrones de conducta.
Sustancias que nos cambian la manera de hablar, incluso de pensar, de relacionarnos y actuar.
De movernos a contrareloj en mundo donde comenzamos a odiar el tic-tac incansable de esas malditas manillas. De esas detestables rutinas que nos marcan nuestro destino a cada momento...y todo por 15 estúpidos días en agosto...
Copulando drogada y borracha al son del rock & roll...
Es el precio que tengo que pagar por no nacer animal.
Es irónico; sólo tenemos una vida pero la vivimos coaccionados por los demás, por la sociedad en que nos ha tocado vivir. Si pudieramos ser nosotros mismos, si pudiéramos despojarnos de la "moral global" que nos envuelve y actuar únicamente por nuestro propio criterio, el mundo sería otro completamente distinto; quizá un mundo animal; quizá nuestro propio mundo.
ResponderEliminarantes de nada, me encantan las nuevas fotografías de tu blog! muy divertidas!
ResponderEliminardespués, tu texto me recordó algo a lo que daba vueltas hace unos días. ¿sabes? los niños, cuando lloran, berrean, chillan, gritan... sin pudor ninguno, ¿cuándo aprendemos a dejar de hacer ruido? ¿cuándo nos domestican las pasiones de esa manera?
curioso, curioso...
Y así es, que de creernos tan humanos nos olvidamos de como vivir bien...
ResponderEliminarSupongo que de vez en cuando estaría bien poder ser animal ^^.
ResponderEliminarEres genial.
Se oye comentar
ResponderEliminara la gente del lugar
"los rockeros no son buenos"
Si no te portas bien
te echarás pronto a perder
y arderás en el infierno (8)
Tienes mucha razón: empezamos siendo lobos y nos hemos domesticado entre todos hasta convertirnos en perros. Con la diferencia de que los perros notan el collar.
(Me ha molao mucho la entrada!)
de Barón Rojo!
ResponderEliminarhttp://www.youtube.com/watch?v=1hjxYq9F9b8