Esta tarde me propuse parar el mundo. Lo he intentado, de verdad que lo he intentado, pero ha sido imposible.
Como bien dice George, se necesitan dos personas para parar el mundo y aunque he puesto todo mi empeño, la flaqueza se apoderó de mi sofá a la hora de comer: no había nadie que me mintiese sobre el delicioso sabor de mi papa carbonizada y de los filetes de la tienda de abajo.
Además, al mismo tiempo que yo intentaba frenarlo otra persona se empeñó en ponerlo a toda velocidad, ¿existen personas biológicamente programadas para llevarnos la contraria y sacar lo peor de nosotros aunque no sean conscientes de ello? ¿será que me irrito con facilidad? ¿fue la causa el no desayunar cereales con miel esta mañana?
Creo que soy un bicho independiente, pero eso te lo contaré mañana, parar el mundo me ha dado mucho sueño.
Hala!! como mola el cambio de escenario!! :O
ResponderEliminarLo de parar el mundo me ha recordado a un libro de Albert Espinosa, creo que el de... "Si tu me dices ven lo dejo todo... pero dime ven".
Yo me había propuesto también este verano pararlo, pero no sé si lo conseguiré... Habrá que buscar horas menos intempestivas... ;)
Ánimo, seguro que lo consigues. Digo yo que tarde o temprano se encuentra a esa persona ^^
Un besito, y buenas noches o buenos días :P
Hola, vecina, que gusto encontrarte por aqui (y por mi blog, menudo alegrón!!)
ResponderEliminarLo primero que te debo decir es que me gusta muchísimo el cambio de look, muy original, y muy atrevido; me gusta.
Lo segundo, respecto a tu entrada, ...ay... que es verdad; que cuando más necesitamos que el mundo esté quietecito, quien menos nos interesa que lo mueva, va y lo mueve. Hace solo un año que fumo, y fue porque sentía que mientras ardía el cigarro el mundo estaba parado, nada circulaba a mi alrededor, lo chungo es que es un síntoma muy claro de los brotes depresivos...no te digo ná!!
Todo pasa, de verdad, como dice el poeta, todo pasa. Eres un dulce de niña y solo tienes que esperar a que llegue el pastelero que te sepa poner la guinda. Sin prisa, las prisas no son buenas. Vale?? (hablo como un padre a su hija...Dios!!!!, como se notan los años!!!)
Y lo tercero, si te pasas este viernes por la botica te llevarás una sorpresa...jejejeje.
Un beso, guapa!!!
Imagino que parar el mundo cuesta menos si son dos, sí, y cansa mucho si es uno solo... Puedes dormir tras el esfuerzo. Mi mundo lo has parado mientras me hacías leerte y ahora, de hecho, voy a encender el ventilador. Un abrazo y disculpa la tardanza en pasarme por aquí y por mi blog, pero es que en verano estoy dando vueltas sin internet fijo :)
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