Ordené mi armario y limpié cada rincón de recuerdos oxidados. Me he convertido en una experta de la sede electrónica e invencible clienta no defectuosa. No me levanté del sofá hasta que terminé la película de "Farmacia de Guardia" y varias grabaciones de "Se Llama Copla". Decidí aparcar los resúmenes de matemáticas y lo cambié por un café, de más de 4 horas, en el que solucionar el mundo y dar mi opinión sobre lo patéticas que me resultan las comuniones.
He dejado a un lado las camisetas de cuello vuelto, las mentiras piadosas y las charlas de medianoche. Le he prestado atención al silencio y guardado las ilusiones en una bolsita que me tomo en forma de infusión todas las noches. He hecho todo lo que he podido y más, pero aún no puedo respirar.
Se me olvidó comprar mi trozo de aire. Perdí los proveedores y empieza a faltarme el oxígeno...
Con tanto bueno... normal que te falte el aire.
ResponderEliminarPero sigue buscando, proveedores habrá mas de los que crees, tu oxígeno llegará.
Preciosa tu entrada.
Un beso grande
Pues yo se de alguien cuyo nombre puede ayudarte ;)))
ResponderEliminarBesos frescos
Te va a llegar el aire. Alguien tiene el albarán y el pedido ya está en marcha. Un abrazo mientras tomas la bolsita de infusiones. :)
ResponderEliminarLograrás conseguir el aire cuando menos te lo esperes. tranquila, se paciente :)
ResponderEliminarpequeña, creo que tengo aire para prestar, por lo menos en el nombre :(
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