- ¿Por qué lloras?
- ...
- ¿Es por él?
- ...
Sólo sollozos contestaban a sus preguntas de amigo desperado capaz de cualquier cosa si ella dejaba de llorar tan sólo un instante, tan sólo por volver a verla sonreir y jugar al ganador de lápices de bigotes o a mirarse fijamente, el que sonría primero, pierde.
- Contéstame ¿Es por ella?
- Es por mí.
- ¿Por tí?
- Déjalo, sabía que no podrías entenderlo...
Lo mas duro es haber estado en esa posición y haber sobrevivido...
ResponderEliminarVaya que has removido fibras sensibles para mi esta noche.
Saludos lejanos.
H.
lo que más me aterrorizaba era saber que iba a sobrevivir a todo aquello, ese "histérica descubro que soy inmortal" que canta Elena Bugedo...
ResponderEliminarpero hoy soy yo la que te manda una canción, el video es lo de menos...
http://www.youtube.com/watch?v=v_VGnBe5ILQ
Y los tipos de plastelina como yo también lloramos (a escondidas y demasiado a menudo).
ResponderEliminarBesos lloricas
Pues sí que le ha dado pocas explicaciones, ¡así no puede entenderlo nadie!
ResponderEliminarcompartir no significa entender... sonríes ya?
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