A medio centrímeto de ti, a kilómetros de tus besos

Escapémenos cuanto antes,
no puedo esperar más.
Reventemos las calles,
hazme gritar.

Sorpréndeme, como siempre has hecho,
haciendo que cada segundo sea un regalo,
haciendo nueva cada sonrisa que me regalas.

Quiero volar contigo hasta tropezar,
hasta rozar las nubes,
hasta sentirte cerca a millones de kilómetros de mí.

Intentaré que esta vez tu locura no haga sombra a la mía,
intentaremos que nos envidie la cordura.
Lograremos lo que nos propongamos,
aunque el resto no este de acuerdo.

Malos tiempos corren para ti,
y no vivo mis mejores, por eso,
envueltos en un parétesis de caramelo
dormiremos, cualquiera de estas noches,
olvidándonos de todo,
guardando cada momento para
poder disfrutarlo cuando
no podamos
vivirlo juntos...

Todo es un pretexto
para pedirte un beso,
y esto es una excusa
para confesar lo anterior.