Gritar hasta plantarle cara a la barrera del silencio. Someternos a la presion de estallar por querer ser ambas ganadores y terminar provocando un caos irreversible del que solo podemos salir si paramos AHORA!. Pero no lo hacemos, por mi parte porque el ego me puede, y por la suya, bueno supongo que el existir durante tanto tiempo le da el derecho suficiente como para resistir hasta acabar por desaparecer o hasta que algo o alguien le suplante.
Noto como mis cuerdas vocales empiezan a rasgarse, pero no por ello pienso callarme.
Mi garganta comienza a echar humo mientras saltan chispas que me van quemando.
Hace tiempo que los dientes me saltaron y mi lengua comienza a agrietarse.
Me tiembla todo el cuerpo pero sigo sin conseguir que me tiemblen los huesos, que fue mi única intencion desde un principio.
Se va apagando, mi voz se apaga sin conseguir su propósito...y es que una vez mas tanto esfuerzo ha servido para nada.
He vuelto a perder el pulso...sonido, tú ganas.
...es duro gritar sin emitir sonidos que al menos el otro consiga comprender... seguro sería todo mucho más sencillo si cada uno simplemente girase al lado opuesto del otro en el siguiente cruce, en el siguiente encontronazo, sin palabras, sin volver la vista, sin recordar... pero es tan duro caminar solo que más duro se hace el dar el paso. creo que entiendo tu post.... y me gustaría pensar que tan sólo es tu imaginación quien lo creó pues el vivirlo se hace a veces insoportable.
ResponderEliminarPara nada....o para mucho...
ResponderEliminarY no seas tan extremista, las cosas no son blancas o negras...a veces el gris nos sorprende ;)
Un beso ególatra!!
grita
ResponderEliminargrita
grita
grita
es lo único que realmente desahoga.
Nunca llegues hasta el extremo de hacerte trizas y luego para nada, sé precavida y asegurate de acabar bien =) porque tú te mereces ser oída, como todo el mundo, pero tú con más razón. Porque lo digo yo! ^^
ResponderEliminarBesote corazón.