lunes, 15 de febrero de 2010

Yo también se escribir entradas para "San Valentín"

18 horas, 32 minutos, 14 segundos. 14. 02. 10

Silenciosa, se mira frente al espejo y se arregla lo mejor que puede, pero intentando no pasarse con el maquillaje. Una base fina que oculte los achaques que le recuerdan que ya no es una niña, tono cálido en las mejillas pera equilibrar la frialdad de su tez, color claro en los ojos para tapar la tristeza y en los labios...¿carmín? imposible, eso hubiese indicado que pide a gritos que le borren el color y ella no recuerda lo que es un beso, mejor un naranja pálido con un delicado y sugerente perfilado.

Ya estaba vestida, pero no se encontraba conforme, y se cambió varias veces de chaqueta y otras tantas de pañuelos, que intercambia con collares que no le decían nada con los pendientes de siempre.

-Creo que ya estoy.

Se repitió varias veces frente al espejo para convencerse que de estaba preparada para salir a la calle. Se acercó a la salida, agarró el pomo de la puerta dirigiendo su mirada al sofá de todos los días: "Voy a tomar un café con mi hermana" dijo. Y la respuesta eufórica le sorprendió, pues aquel que retransmitía partidos de algún tipo de competición en un canal de deportes le contestó "¡Y el resultado de hoy es impresionante, nunca antes fuimos espectadores de algo tan sensacional!". Y con los halagos de aquel periodista tan agradable cerró la puerta con un suspiró, pues las manos no le funcionaban.

Mientras tanto, el sofá, seguía mudo, público del partido, y ella bajaba las escaleras deseando desaparecer de todo aquello, al menos un par de segundos.





Pequeño relato
para todos aquellos que me pregunten porque no me gusta "san valentín",
para los que me llaman fría,
para los que dicen que no tengo corazón,
para los pocos que se compadecen por no saber como sigo sonriendo,
para el que me dejó plantada,
para niño pequeño que se sonroja al mirarme,
para mis amigos,
para alguna amiga,
para el que da señales de vida 4 años más tarde,
para mi hermana por pecar de buena,
para el que me dejó otra vez plantada,
para el que no me miraba y ahora me persigue,
para ti,
para mí,
para todos los que creéis en san valentín
y para los que lo odiéis tanto como yo.




¿Por qué no creo en el amor?
Porque para piropos de un periodista me basta con encender la tele,
porque no creo en las cosas cuyo significado desconozco.
Porque tengo miedo.

4 comentarios:

  1. I belive. En las personas sensibles que pasan de los días señalados, porque saben que cualquier dia, el dia menos pensado, será el dia!

    besos

    PD por cierto, que progama utilizaste para las fotos del gorrito de colores?

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  2. Nada de valentines... nada de nada! jajajaja!

    yo tp creo

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  3. Mujer:

    No hay que odiar para olvidar, no hay que tener miedo para razonar; entre mas atención le presentes a tu distracción menos podrás dejar atrás eso que no necesitas.

    Buena lectura, yo dejé de prestarle atención al día del consumista hace años, la frialdad nos hace inmunes al cambio, pero receptores al entorno, piensalo de esa manera o comoquieras, la importancia es trascender, ya sea con una o dos palabras o con una o tres personas... al final del camino solo uno sabe cuantos corazones ha tocado en su vida, he ahi lo que verdaderamente importa.

    Esto solo es un pensamiento a manera de opinión, y nadamas.

    buena semana.

    H.

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  4. Hoy no habrá letras sin sentido; hoy el silencio lo invadirá todo. No será necesario el maquillaje, porque el espejo no reflejará la imagen de aquello que nunca fuiste. Nadie contestará tus palabras, porque jamás buscaste una respuesta para ellas. Hoy serás lo que tú quieras ser; hoy serás tú. Tú y tu miedo; ese que hace que te sientas viva.

    Porque lo siento; creer o no creer, no es una elección.

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Gracias por pasarte por el bosque mágico, vuelve cuando quieras ;)