de vuelta y vuelta

Quiero

ser la culpable de derramar batidos de lujuria por mundos fantásticos que me dirigian hasta Mordor un día más. Empañar los cristales de burbujas protectoras de lugares un tanto "modernos y ..."

Tener un
apetito de nada a la vez que demasiada gula, perder el hambre y la sed, ganas de bailar con los pies pegados al suelo y vivir en el insomnio con los ojos cerrados convatiendo al sueño con una taza de café.

Extraño
atracones de nocilla, ir a comprar y olvidar hacer la compra, hablar con un amigo desconocido en mitad de un gran escenario y teniendo como público las más singulares miradas de admiración y perplejidad.

Adorable
es reirme del mundo, ese que hace todo lo posible para que nada salga bien, ver como intenta torcerlo todo mientras sonrisas de Peter Griffin como banda sonora hacen que todo sea simple,
sencillo...extraño.

Cerca

en el asfalto, desde el suelo, se observan mejor las antiguas minuciosidades que se crearon para verse de pie, o incluso como muchos deciden, de paso. Yo prefiero quedar cerca del suelo, donde se roce la luna.

...

A Amelie le encanta hundir los dedos en sacos de legumbres y hacer saltar las piedras. A mi me gusta ver golpear cigarrillos en la mesilla y hacer triangulitos con las bolsas de la compra.